La patria nos llama.

                                                                                 

Con la herejía de Lutero se inició la muerte del espíritu de Europa, con la Revolución Francesa las monarquías y la política dejaron de servir a Dios y a la patria para rendirse a la voluntad y a las pasiones de las masas, con la derrota del 45 comenzó la invasión de Europa que implantó el consumismo y el liberalismo.

España en 1978 perdió la guerra que en 1939 había ganado por las armas, desde entonces se han dado pasos que han llevado a la destrucción de la conciencia nacional, de su unidad, soberanía e independencia.

No podemos permitir que en este año o en el próximo seamos testigos de la muerte de la patria ni podemos asistir a como se rompe la unidad de España sin luchar.

                                                              

Hemos de ser absolutamente conscientes de que somos una minoría y que la mayor parte de nuestros compatriotas han perdido toda conciencia nacional y consideran que nada es absoluto y todo debe ser sometido a la voluntad de la mayoría, pero el conocimiento de esta triste realidad no puede llevarnos a la inacción ni sumirnos en una cobardía que nos convierta en testigos cómplices de la muerte de España.

 Frente alplanteamiento vacío, subjetivo y mercantilista afirmamos verdades absolutas que no se pueden someter a la legalidad ni a las voluntades humanas.

En estos críticos momentos por los que atraviesa nuestra patria no permitiremos que España se suicide porque Cataluña es España.

El secesionismo es un crimen que no perdonaremos, al igual que tampoco perdonaremos a aquellas autoridades que no cumplan con sus obligaciones ni a aquellos uniformados que pongan por encima de la unidad de España la obediencia a los traidores.

                                                                                     

Tenemos la obligación moral de unirnos a nuestros camaradas dejando de lado siglas, intereses particulares y diferencias accesorias puesto que lo que ahora está en peligro es la existencia misma de la patria.


                                                                             

                                                              

Es momento de salir a las calles y mostrar nuestro amor a España y exigir la continuidad de su unidad, hemos de   escribir en los periódicos locales, avisar a las radios, concentrarnos, hacer pegadas y pintadas. Seguramente con esto no será suficiente y nos hemos de preparar para la lucha.

ESPAÑA NOS LLAMA, Y SI NO ACUDIMOS AHORA MAÑANA SERÁ TARDE.

                            ¡¡VIVA LA UNIDAD DE ESPAÑA!!!

                                                                                   

                                           ¡¡¡ARRIBA ESPAÑA|||