miércoles, 17 de noviembre de 2021

PATRIOTAS CONTRA GLOBALISTAS, NO A LA AGENDA 2030

 

                                                                                            




En estos momentos estamos atravesando el que sin lugar a duda es el mayor ataque que ha sufrido la civilización occidental y la especie humana en general.

 En esta crítica situación nuestra actitud no puede ser otra que la de llevar a cabo acciones en contra de esas intenciones, acciones que se han de  basar  en el conocimiento de lo que realmente ocurre, cualquier cosa distinta a ello no dejaría de ser una muestra de cobardía, ingenuidad y pasotismo.

Es cobardía cuando se cede ante la presión social, legal, laboral o ante lo políticamente correcto. El pasotismo no es sino una manera de esconder todo lo anterior bajo la excusa ridícula de no conocer lo que ocurre debido a que no le interesan las cuestiones sociales, políticas o simplemente humanas. Es decir, negarse a conocer las cosas que ocurren para de esa manera justificar la ausencia de reacción y su cobardía.

En el momento en que nos encontramos el enemigo no se manifiesta de manera clara como ha venido sucediendo a lo largo de la historia, no lo encontramos en un país que nos ataca o invade, en un grupo social que nos amenaza, o en regímenes totalitarios que tratan de imponer su cosmovisión ideológica por medio de la fuerza.

La situación actual es mucho más difícil de detectar e incluso de entender, la ofensiva a la que ahora nos enfrentamos es infinitamente más imprecisa en tanto que no presenta un frente claramente definido y porque además  el enemigo actual cuenta con  unos medios de comunicación omnipresentes y casi omnipotentes que  desdibujan la realidad de lo que acontece presentando una realidad falsa como verdadera a la par que ridiculiza y menosprecia a todo aquel que osa presentar la real amenaza que  las élites y sus esbirros  están llevando a cabo.

Como más arriba hemos apuntado, el primero y fundamental de los pasos que han de darse para hacer frente a la agresión de la que estamos siendo objeto es tener clara conciencia de cuál es la agresión que sufrimos, de donde procede y en que consiste. Sin conocer estos puntos podemos estar seguros de que errará cualquier acción que desarrollemos o que el no adoptar medidas por no considerar la situación lo suficientemente grave se convertirá en   una colaboración con los planes de aquellos que pretenden sojuzgarnos.

 

Es por ello que comenzaremos señalando el peligro fundamental al que estamos expuestos como especie, como sociedad y como individuos y los medios que los que tratan de someternos utilizan para lograrlo.

 

Hemos de tener diametralmente claro que lo que se da en la actualidad es una lucha a muerte entre globalistas y patriotas, entre quienes pretenden instaurar un nuevo orden en el que el individuo se vacíe de humanidad, un individuo sin espíritu sin relación con sus semejantes a través de las entidades naturales y sociales, un individuo carente de familia, de patria y de trascendencia hacia Dios. Los globalistas buscan acabar con la soberanía personal, nacional y económica para de esta manera esclavizar a la humanidad y ponerla toda en manos de una élite compuesta por los dueños de las grandes transnacionales industriales, financieras y energéticas, en manos de individuos que no se conforman con el dinero ni con el poder que de la deriva, sino que buscan imponer un dominio absoluto sobre la población humana mundial. Para ello no pueden aceptar el mero cambio estético y superficial, sino que buscan establecer un poder total y absoluto que ha de pasar obligatoriamente por l                                                                                     a implantación de ese Nuevo Orden Mundial que ha de crear una nueva religión única y mundial, una economía también de carácter global, una legislación que se imponga a todas las naciones e individuos y una organización monetaria y financiera común a todas ellas.

 

Pero existen algunos problemas, algunos de ellos muy serios, para que esas élites globalistas puedan conseguir implantar y mantener esa pesadilla homogeneizadora. Es por ello que desde la finalización de la Segunda Guerra Mundial, pero especialmente desde   la última década del siglo XX se han venido desarrollado una serie de operaciones de ingeniería social, tanto individual como internacional, que han venido a combatir esos problemas para implantar los planes globalistas.

El primero de ellos se inició al finalizar la Primera Guerra mundial con la creación de la denominada Sociedad de Naciones, la cual iniciaba la creación de un ente supranacional que iniciase el recorte de las soberanías nacionales, pero cuando se inició este proceso globalizador con éxito fue cuando se creó las O.N.U.  una vez finalizada la Segunda Guerra Mundial, y no fue solamente la organización de las naciones unidas sino todas esas otras organizaciones dependientes de ella como la Organización Internacional del Trabajo (O.I.T.), El Fondo Monetario Internacional (F.M.I.), La Organización Mundial de la Salud (O.M.S.), U.N.I.C.E.F., etc., etc.

De la misma manera se han ido creando según las distintas zonas del planeta organizaciones supranacionales regionales que poco a poco han ido desposeyendo de soberanía a las distintas naciones, un claro ejemplo es la Unión Europea (U.E.), organización que ha asumido el verdadero gobierno de los países puesto que sus normas son de obligado cumplimiento.

 

Un problema fundamental para los globalistas no sólo es llevar a cabo este adueñarse de las soberanías nacionales y con ello de las individuales sino   conseguir que esa situación de control se mantenga en el tiempo y la población mundial se someta a los dictados de una élite globalista que podría  ser superada por una población tan numerosa y que podría volverse en su contra y de ese modo acabar con sus planes.

De ahí viene esa verdadera obsesión maltusiana de reducir la población mundial de manera drástica, llegando a señalar los máximos exponentes globalistas y las instituciones a su servicio que la población humana sobre la tierra no debería pasar de los quinientos millones, en la actualidad somos poco más de siete mil millones.

Por supuesto siempre a nivel público manifiestan una serie de razones que son aceptables por todos, razones como   reducir la pobreza  dado que con la actual población los alimentos y riquezas no son suficientes para todos, combatir la contaminación, proteger el medio ambiente  de una explotación fuera de control y combatir el cambio climático que  los gases de las industrias y automóviles de tal cantidad de población provoca.

 

Para lograr esa drástica reducción de la población humana esas élites se han servido de todo tipo de métodos, desde la generalización de la legalización del aborto hasta la generalización de la homosexualidad a través de la promoción e imposición del movimiento L.G.T.B.I. y la  legalización de los “matrimonios” del mismo sexo pasando por la puesta en marcha de la criminal campaña de vacunación mundial contra el denominado covid- 19, cuestión claramente demostrada por  los análisis científicos realizados por el doctor D. Pablo Campra, el cual tras analizar con su equipo con otros muchos distintos viales de distintas vacunas aplicadas a la población ha encontrado  que en las mismas hay una proporción significativa  de oxido de grafeno (material tóxico que a su vez son radiomodulables), este descubrimiento viene a dar explicación al gran número de accidentes vasculares y cerebrales de gravedad e incluso con resultado de muerte que aparecen en la población vacunada. Los mismos datos presentados por la   CDC estadounidense como por el ministerio de sanidad británico señalan como a partir del inicio de la vacunación aumenta de manera desmedida la cantidad de muertos e ingresados en UCIS entre los vacunados y no entre los que no lo habían sido.

Merced al tema de la pandemia se ha logrado imponer a la población un grado tal de pánico que ha permitido imponer toda una serie de cambios legales contrarios a la libertad  de los individuos que en otra situación no se podría haber llevado a cabo. Por otra parte la vacunación ha dado lugar a una división agria entre los vacunados y no vacunados, logrando los globalistas un nuevo paso sirviéndose del divide y vencerás.

 

Tras la campaña criminal que acabamos de señalar u a la que aún estamos sometidos seguirá la de la generalización e imposición de ese cuento macabeo del desastroso cambio climático derivado de la acción del ser humano, este planteamiento con el que no hay unanimidad científica servirá para aumentar los gastos en las denominadas energías verdes, que repercutirán en un aumento de los impuestos de la energía eléctrica dado que repercutirá en los consumidores los  gastos que las empresas eléctricas  ha de hacer para implantar  las energías eólicas ,  solar, etc. Lo que también dará lugar a un aumento del precio de los bienes de consumo debido a que el transporte se encarecerá al subir el precio del combustible y por la imposición del uso del transporte eléctrico.

Siguiendo esta idea del cambio climático causado por el hombre se está llegando a niveles de estulticia tales como señalar que la ganadería, estabulada o no, ha de ser reducida debido a los gases contaminantes que producen las ventosidades de los animales, así como la que produce la descomposición de los restos animales de la ganadería y de vegetales de la agricultura, llegando a proponerse que se deje de comer carne natural y comer sólo carne sintética.

Con todos planteamientos y posteriores imposiciones se conseguirá acabar con la economía independiente de los ganaderos y agricultores, así como hacer que tan solo aquellos que cuenten con unas posiciones económicas elevadas puedan tener acceso a elementos alimenticios como la carne natural. De la misma manera habrían conseguido con el aumento del precio de la energía que solamente las élites   económicamente dotadas podrían realizar cosas que se habían generalizado como viajar, desplazarse, etc.

 

Todo esto se incluye en la Agenda 2030 que sirviéndose del bonito y equívoco lema del Desarrollo Sostenible en pro del bien de la humanidad no persigue   otra cosa que acabar con la libertad humana, la ruptura de toda espiritualidad, la anulación de las soberanías nacionales, la generalización de ideas contrarias a la civilización cristiana occidental y la esclavización del ser humano a unas élites globalistas.

 

Es así que los patriotas no deben confundir cual es el objetivo que han de llevar a cabo, objetivo que no puede ser otro que acabar con la Agenda 2030 y el Desarrollo sostenible. En estos momentos no hay otro combate que merezca ser llevado a cabo, todo lo demás es equivocación o maniobra de distracción.


                                                              




                                                                   

jueves, 1 de julio de 2021

CHICOS CONFINADOS EN BALEARES, UN AGRAVIO COMPARATIVO PARA EXTENDER EL PÁNICO Y FAVORECER LA VACUNACIÓN INFANTIL..

 

                                                                                   


             Estamos siendo testigos estos días de como en Baleares se produce un monumental acto de injusticia, un agravio comparativo llevado a cabo por nuestras autoridades en contra de compatriotas nuestros, una injusticia que deriva de ese complejo de culpa al que desde hace un par de siglos se viene inoculando a todos los occidentales blancos en general, contaminación que en las últimas décadas viene sufriendo especialmente España.


Como todos habrán podido suponer me estoy refiriendo a la grave situación por la que se está haciendo pasar a cientos de jóvenes españoles, gran parte de ellos menores, que habían ido a Baleares a celebrar el fin de curso.

 

Esos chicos, repito que muchos de ellos son menores de edad, entraron en Baleares habiendo presentado documentos de análisis, pcr y antígenos, que demostraban haber dado negativo en la presencia del virus supuestamente causante de la supuesta pandemia que nos ha cambiado la vida desde hace cerca de dos años.

 Días después de su llegada   estos cientos de jóvenes estudiantes han sido confinados de manera obligatoria y expeditiva en un denominado hotel COVI con la excusa de haber estado en contacto con otros jóvenes que sí habrían dado positivo. Lo que no es de recibo es que ante las declaraciones de los jóvenes confinados negando tal acusación se les niegue la realización de pruebas pcr o de antígenos que permitan demostrar si realmente están infectados y pueden ser vehículos de transmisión y han de permanecer en cuarentena o por el contrario no están afectados y libres de cualquier infección, con lo que puedan moverse libremente por las islas o retornar con sus familias.

 

Al igual que para entrar en las Baleares se exige la presentación de una prueba pcr o una de antígeno realizada   con un máximo 47 horas antes de la entrada, lo mismo ocurre para entrar en las islas Canarias. Y es precisamente en esta exigencia y en las consecuencias que derivan del hecho de que estas no sean cumplidas donde se puede observar de manera clara y palmaria el agravio comparativo al que antes he venido refiriéndome.


Resulta absolutamente intolerable que las autoridades y las fuerzas a sus órdenes apliquen con tanta contundencia y arbitrariedad las medidas sanitarias a estos chicos a la par que los inmigrantes que llegan de manera irregular a las islas Canarias violando todos los requisitos legales y sanitarios precisos para entrar en nuestro territorio no reciben sanción alguna ni sean confinados de manera obligatoria, siendo además trasladados de manera oculta  a la península.             


Desde mi punto de vista, y creo que desde el de cualquier observador medianamente objetivo, la incongruencia antes descrita sólo puede explicarse por un pensamiento que viene a considerar a los foráneos, sobre todo si son de una raza y cultura diferente a la blanca occidental, como individuos que no han de ser sometidos no a nuestras normas, ya sean estas legales o sanitarias, vigentes en nuestras sociedades y territorios. Y esto es así dado que son estas personas son consideradas víctimas de la acción del blanco y de su sociedad. De esta manera a modo de compensación fruto del complejo de culpa blanco occidental se encontrarían con una serie de privilegios como es no verse sometidos a medidas coercitivas referidas al cumplimiento de normas y leyes relativas a la legalidad del ingreso y estancia en nuestro territorio, así como la exigencia de someterse a ciertos requisitos sanitarios, normas y leyes que si han de cumplir los nacionales u occidentales.

 

La decisión de una juez permitiendo que todos aquellos jóvenes que estaban confinados y que hubiesen dado negativo en las pruebas para detectar la presencia del tan cacareado virus es para la inmensa mayoría de la población y para la totalidad de los medios de manipulación un punto final para todo el suceso, suceso que habría quedado en un mero hecho puntual que no va más allá de una triste anécdota sin más trascendencia.

 Ahora bien, lo cierto es que todo lo referido al tremendo agravio comparativo producido se ha pasado por alto totalmente.


Pero toto esto no ha sido un mero hecho casual, un equívoco político derivado de un exceso de celo por parte de las autoridades autónomas baleares para proteger la salud pública.

 

Tras este verdadero secuestro se esconde un intento de aumentar el pánico  en la población y así justificar el inicio de la vacunación en niños y adolescentes, de hecho apenas acaba de terminar el episodio al que nos hemos venido refiriendo cuando varias  comunidades autónomas señalan que comenzarán a vacunar a la población  infantil y adolescente.                   


             

miércoles, 23 de junio de 2021

LA UNIDAD DE ESPAÑA ESTÁ POR ENCIMA DE LA CONSTITUCIÓN Y DE LA DEMOCRACIA.

 

                                                                             


                                                                                                     

En España vamos de desgracia en desgracia, de traición en traición y de ataque a la patria en agresión a su unidad.

 

Y son precisamente los que legal y moralmente están encargados de una manera especial de defender la patria, su unidad y su continuidad histórica los que ya sea por acción o por omisión los que llevan a cabo las agresiones para disgregar, o balcanizar como se dice ahora, y de esta manera acabar con la nación española.

 

El último episodio al que hemos asistido ha sido la concesión de un indulto a los que desde sus cargos oficiales en la generalidad catalana intentaron, llegando incluso a declarar en el parlamento catalán la independencia y secesión de Cataluña del resto de España. Todo esto se aplicó de manera violenta e ilegal de la región, ahora denominada Comunidad Autónoma, catalana.

Estos traidores secesionistas han insistido públicamente en su intención de llevar a cabo nuevamente los pasos necesarios que lleven a la independencia de Cataluña. A esta falta de arrepentimiento, condición para poder conceder el indulto a un condenado, se suma la manifestación en contra de tal concesión por parte el Tribunal Supremo.

 

Ante la gravísima traición que el gobierno presidido por Pedro Sánchez ha llevado a cabo y ante el estrepitoso silencio de la población, del monarca y de los ejércitos de España hay muy poco espacio para la esperanza.

 

Pero hay una concepción previa que afecta tanto al tema al que nos hemos venido refiriendo como a otros tantos que ponen en peligro a nuestra patria. Se trata de un planteamiento que a mi entender resulta fundamental a la hora de hacer frente a los peligros, problemas e ilegalidades a los que España se ve sometida por sus enemigos tanto internos como externos.

 

Este planteamiento es básico y de origen, lo que, a la hora de enfrentar cualquier situación relacionada con nuestra patria lleva a provocar siempre errores de bulto.

 

Este planteamiento teórico, con claras y directas consecuencias prácticas, se sustenta en la errónea equiparación entre España y la Constitución o entre la patria y la democracia. Olvidando que España es un ente metafísico preexistente a una Constitución y a unas leyes cambiantes y dependientes de la moldeable voluntad popular. Siendo España también distinta a una forma de gobierno como es la democracia.

Esta errónea conceptualización lleva a identificar dos realidades que para nada coinciden, consecuencia de ello es rebajar el sentido y el valor absoluto de la nación al de elementos puramente accidentales y dependientes de la cambiante voluntad popular.

 

De esta manera y con estos planteamientos no se está haciendo otra cosa que relativizar lo absoluto y absolutizar lo relativo, siendo así que todo se reduce a la divinización de la voluntad de la mayoría concretada en la democracia y en la constitución o las leyes. Siendo así que cuestiones absolutas y metafísicas pasan a ser meros elementos accidentales dependientes de la opinión.

 

Partiendo de esta concepción relativista referente al mismo concepto de España y de su unidad ya está derrotada cualquier defensa de las mismas, y estará todo perdido dado que una mera variación de la constitución (la minúscula está puesta con intención) conlleva que puedan aplicarse medidas que lleven a la ruptura de la unidad nacional.

 

Solamente si es reconocida la nación española y su unidad como principios inalterables a los cuales deben plegarse las leyes y la constitución puede ser España defendida con una mínima posibilidad de éxito, de otra manera está asegurada su derrota pues a los enemigos de la nación siempre les cabrá  el recurso a  variar la constitución merced a una voluntad popular escondida bajo la sacralizada democracia.

 

Y es precisamente a esto a lo que estamos asistiendo respecto a la cuestión del secesionismo catalán, el tema nunca podrá ser solucionado obviando la primacía absoluta de la unidad España y haciendo que esa realidad metafísica e histórica  se supedite a cuestiones accidentales como son la constitución, la legalidad y la democracia.  

                                                                                   






                                                         

martes, 15 de junio de 2021

EL RIDICULO PASEO DE BIDEN Y SANCHEZ, LO QUE TRASLUCE.

 

                                                                                     


  

El bochornoso espectáculo que se produjo ayer al finalizar la cumbre de la O.T.A.N. y que todos pudimos ver a través de los medios de comunicación y especialmente de las redes sociales, producía tanto jocosidad como vergüenza ajena.

Este suceso que protagonizó el presidente español Pedro Sánchez, puesto que ostenta ese cargo para desgracia nuestra y desgracia de España , dejó de lado cualquier respeto hacia la condición institucional que en ese momento detentaba, para convertirse en un botarate lameculos que se rebajó, y de que modo, ante el presidente de los Estados Unidos.

 Hizo el ridículo y se rebajó, pero en tanto representaba a nuestra patria también a ella la rebajaba y ridiculizaba.

 

Este aspecto de lo acontecido tras la cumbre atlántica creo que ha sido suficientemente abordado y criticado por comentaristas, población en general y a través de caricaturas y memes publicados.

Sin tratar de justificar o rebajar la gravedad de la actitud del okupa de la Moncloa, nada más lejos de mi intención, creo que hay un aspecto que ha sido pasado por alto en los comentarios y análisis más o menos jocosos que se han realizado respecto del incidente que nos ocupa.

Me estoy refiriendo por supuesto en la actitud altiva y despreciativa que el actual dirigente norteamericano, Joe Biden, mostró hacia el presidente español. Que por mucho que nos duela a muchos es Pedro Sánchez y que en ese momento era la mayor representación de nuestra patria en la reunión de la O.T.A.N.

En ninguna circunstancia, por mucho que actualmente España tenga en su gobierno elementos comunistas y que su papel económico esté en horas muy bajas, no podemos tolerar que el dirigente yankee lleve un acto de menosprecio al máximo dirigente español en ese acto, y más cuando se supone que España es un socio militar y económico y cuando mantiene en nuestro territorio bases militares.

A mi entender hay que considerar si este desplante  del dirigente norteamericano no es un acto más de esa obra que los Estados Unidos está llevando a cabo en la cuestión de Marruecos y en la confrontación  que  este país norteafricano mantiene con España, a saber el reconocimiento del Sahara Occidental como parte integrante del territorio marroquí, la ausencia de posicionamiento con un aliado  y miembro de la organización atlántica como es España, así como la venta a gran escala  de material militar de última generación  a Marruecos en unos momentos en los que la tensión con España es más que clara.

Estas actuaciones remente hostiles de la administración norteamericana, sin lugar a duda marcadas por la presión del lobby sionista sobre la Secetaría de Estado U.S.A. una vez que el país magrebí reconoció en el 2020 a Israel, y con ello su soberanía sobre los territorios palestinos ilegalmente ocupados por el Estado sionista.

Ante este estado de cosas se hace necesario que la administración española tome en consideración la realidad presente y actúe en consecuencia.

Hemos de tomar en consideración que ante el expansionismo de Marruecos estamos absolutamente solos, ya que ni diplomática, ni económica y ni por supuesto militarmente contaríamos si resulta necesario con el apoyo de la Unión Europea ni de la O.T.A.N.  ni por supuesto de los E.E.U.U., que como ha demostrado siempre estará del lado de su aliado norteafricano.                      

Siendo así las cosas España no puede verse obligada a obedecer las instrucciones militares que recibe de la O.T.A.N.

 

España no puede permitirse estar molestando las fronteras rusas con esa supuesta vigilancia aérea de las fronteras aéreas de los países bálticos, ni puede   vigilar las aguas del Mar Caspio con su Armada. Tampoco tiene sentido alguno el despliegue de nuestras fuerzas en el Libano para de hecho proteger las fronteras de Israel contra Hezbollah.

Al llevar a cabo estos actos, que son vistos por la Federación Rusa como acciones hostiles,  nos estamos cerrando las puertas a una posible alianza con  la gran potencia que  podría  frenar la expansión marroquí, dejando a la Armada rusa  utilizar los puertos de Ceuta y Melilla.

                                      


Y no puede llevar a cabo todas estas “misiones en el extranjero” como suelen denominarlas dado que en estos momentos las fuerzas militares, ya de por si mermadas, han de estar en la frontera de España con Marruecos y en las ciudades españolas de Ceuta y Melilla que es donde realmente se las precisa como elemento disuasorio y de respuesta ante cualquier posible agresión.

 

En estos momentos España no debe nada a Europa en tanto O.T.A.N. o en tanto U.E. en lo que se refiere a las relaciones con Marruecos y en los métodos de protección de nuestras fronteras puesto que ni una ni la otra se implican ni implicarán en la defensa de Ceuta, Melilla y las Canarias. 

   


Económicamente España puede, en función de la posición que adopte Marruecos, estrangular al reino alauita   impidiendo el paso de sus mercancías por nuestro territorio camino de Europa.

 

miércoles, 9 de junio de 2021

EL PAPEL DE ISRAEL Y ESTADOS UNIDOS EN EL CONFLICTO CON MARRUECOS.

 

                                                                                     


  

En estos momentos nuestra patria atraviesa una grave problemática con Marruecos padeciendo nuevamente sus ansias expansionistas. Los acontecimientos que ahora nos ocupan vienen fuertemente influenciados, determinados inclusive, por una situación y unas circunstancias fundamentales que están siendo pasadas por alto, a mi modo de ver voluntariamente ocultados.

La cuestión a la que me refiero y que desarrollaré a lo largo de esta entrada, además de proporcionar una explicación a muchas cuestiones supuestamente incomprensibles, serviría para que nuestros gobernantes se puedan adelantar a futuros movimientos del enemigo del sur, nunca he entendido eso del “amigo del sur” o tomar las medidas diplomáticas para contrarrestar la acción   marroquí en este terreno.

Lo cierto es que estos datos nunca serían mostrados por unos medios de comunicación-manipulación absolutamente vendidos a esos mismos a los que más adelante nos vamos a referir, de la misma manera la inmensa mayoría de la población consideraría la información como el resultado de un prejuicio contrario a las “víctimas” por antonomasia, y es que las mentes de esponja de estos enanos mentales se niegan a aceptar la realidad debido a la ingeniería social y a los lavados de cerebro de los que desde hace décadas vienen siendo objeto.

La cuestión es complicada de presentar, lo que nos lleva en un primer momento a hacer referencia a una serie de dudas que a todos se nos vienen a la cabeza para a continuación presentar unos hechos que   darán cumplida explicación a esas interrogantes que fuera del contexto que esos datos aportan.

 

Cuestiones como que los Estados Unidos de América “reconociesen” como perteneciente al reino de Marruecos unas   tierras en proceso de descolonización como son las del Sahara Occidental, la venta masiva de armamento a Marruecos, régimen enemigo de un miembro de la O.T.A.N. y de la U.E. como es España.  La realización de maniobras militares y la instalación de bases en territorio del país árabe, la nula toma de posición ante cuestiones claramente ofensivas por parte de Marruecos contra España como la invasión de Ceuta, las Islas Canarias o la llegada ilegal a España de decenas de miles de inmigrantes procedentes de territorio marroquí bien por mar o bien saltando la valla.

Todo esto, así como otras actitudes y acciones norteamericanas nos llevan a sospechar que detrás de todo ello debe existir un suficientemente importante elemento que lleve a que U.S.A.  actúe de una manera en la que se pone antes del lado de un país árabe que de una nación aliada perteneciente a la O.T.A.N.  y en cuyo territorio tiene importantes bases militares de utilización conjunta como es España.

Y es precisamente el hecho de que en el año 2020 el reino alauí reconociese al Estado de Israel el que explica la posición tomada y mantenida por los Estados Unidos.

 

El que el país árabe reconociese al Estado sionista el año pasado fue una manera de equiparar las situaciones de Palestina y la de Canarias, las ciudades de Ceuta y Melilla y la del Sahara Occidental. Estableciendo que el   reino de Marruecos en ambos casos negaba valor a la posición española de que Ceuta y Melilla eran España mucho antes de que existiese el Estado marroquí. De esa forma se respalda la posición israelí que niega todo valor respecto a la soberanía territorial de la presencia palestina previamente a la creación en 1948 del Estado de Israel.

 

Creo que a nadie se le escapa la determinante influencia que esto tiene en la política de los Estados Unidos, y es que la influencia y el poder del lobby israelí sobre la política exterior de la Secretaría de Estado norteamericana es tal que determina la toma de posturas en el exterior, en muchas ocasiones incluso en contra de sus propios intereses nacionales.

En esta situación las posibilidades española respecto a mantener la soberanía de Canarias, pero muy especialmente sobre las ciudades españolas de Ceuta y Melilla es desesperada , a menos que sea capaz de  maniobrar con inteligencia en el terreno diplomático y con decisión a la hora de invertir de manera decidida en las fuerzas armadas que son las que han de afrontar una  agresión por parte del reino de Marruecos.

Lo que de principio España no puede hacer, por mucho que se lo indique u ordene la sionista O.T.A.N., es enviar sus tropas al Mar Caspio a Lituania o a Polonia para molestar a la Federación Rusa, cuando seguramente es una de las pocas opciones que nos quedan para mantener la soberanía sobre Ceuta, Melilla y Canarias.

Lo que tampoco tiene sentido alguno es continuar con la presencia de nuestro ejército en el Líbano para de hecho colaborar en la defensa del Estado de Israel frente a Hezbolla. Esto sólo nos puede servir para desquebrajar aún más nuestras anteriores buenas relaciones con los países árabes, y sobre todo con el mundo chiita.

Desde mi punto de vista la manera de hacer frente a la delicada situación a la que en estos momentos se enfrenta España ha de partir de dos cosas: De un lado tomar conciencia de cuales son en estos momentos nuestros verdaderos enemigos, Marruecos, Israel y Estados Unidos,  y de otro estar dispuestos a poner en marcha todos y cada uno de los recursos, ya sean estos diplomáticos, militares, económicos o estratégicos, de los que podamos disponer para la defensa de la soberanía nacional.

Los españoles, y en especial las autoridades encargadas de tomar decisiones que afecten a esta situación, hemos de tener muy claro que en estos momentos España está absolutamente sola a la hora de defender su integridad territorial    frente a Marruecos, porque E.E.U.U, La O.T.A.N. y los países que forman parte de ella no moverán un dedo en nuestro favor.

 Siendo esto así lo que no podemos hacer es cerrarnos puertas al enfrentarnos con la Federación Rusa o con los países árabes contrarios a Israel pues quizá sea a través de ambos como podamos organizar la defensa de nuestros intereses.

 

España ha de tener en cuenta cuales son los elementos y circunstancias de los que se puede servir para afrontar la acometida que ahora sufre a manos de Marruecos con el apoyo de Estados Unidos y del Estado judío. Como lógicamente se deduce de lo ya dicho no podemos poner nuestra esperanza en el apoyo de la O.T.A.N. ni de nuestros aliados de la Unión Europea, que son los mismos que conforman la organización atlántica. Dado que hemos considerado inverosímil cualquier ayuda de los Estados Unidos, más bien sería el reino alauita el que recibiría su apoyo, material y de inteligencia. Resulta sumamente importante   mostrar al “primo de zumosol” norteamericano, que si no recibimos de él ayuda alguna en esta situación, buscaremos esa ayuda en la Federación Rusa concediéndole por ejemplo la instalación de un puerto a la armada rusa en nuestras costas del sur o en alguna de nuestras ciudades del norte de África.

Como de la O.T.A.N. y de las naciones europeas en general no recibimos ni recibiremos ayuda en contra de la invasión migratoria  que induce Marruecos, hemos de impedir el paso por  nuestro territorio de cualquier  mercancía procedente del reino de Marruecos, con esto por un lado se conseguiría estrangular  la economía del vecino del sur y por otro la población marroquí seguramente se levantaría contra el sátrapa que los des-gobierna

Pero antes de adoptar estas medidas lo que el gobierno español debe hacer es fortalecer al máximo la capacidad militar de las Fuerzas Armadas españolas y paralizar cualquier ayuda económica que en la actualidad está dando España al reino alauita.

No estaría de más ir mandando un mensaje claro de nuestra determinación a los Estados Unidos poniéndonos en contacto con la Federación Ruso para ver su actitud ante la posible instalación en algún puerto de Ceuta o Melilla.

De la misma manera  España debería amenazar a los Estados Unidos con no renovar  la estancia de las bases norteamericanas en suelo español caso de que continúe  armando  a Marruecos o lo apoye indirectamente en sus  aventuras migratorias.

Hay que tomar en consideración que estos sondeos harían abrir los ojos a los altos mandos de los E.E.U.U. ya que llevan años dando muestra públicas de estar hartos de hacer las guerras de Israel, y la colocación de la Armada Rusa en uno de los lados del estrecho de Gibraltar sería consecuencia  de continuar plegándose a las presiones del lobby sionista de Washington.

 

Basta ya de que España esté siempre sometida a los caprichosos intereses de Marruecos y cediendo ante él.

Pero para todo esto hemos de fortalecer el ejército y asegurarnos la cobertura de un nuevo y fuerte aliado, hemos de dejar de mandar tropas a la frontera oeste de la Federación Rusa o al Mar Caspio.



                                                        


sábado, 22 de mayo de 2021

LA INVASIÓN DE CEUTA, LOS SALTOS A LA VALLA Y EL BUENISMO.

 


                                                                        


  

La invasión masiva y nada disimulada que desde la tarde-noche de ayer se viene produciendo en Ceuta por parte de población marroquí, en su mayoría hombres jóvenes en edad militar, no es otra cosa que un capítulo más de la invasión que a pequeña escala se viene produciendo desde hace casi una década, una invasión que viene sufriendo Europa en general y muy especialmente España.

Como hemos señalado, los sucesos que ahora nos ocupan no son para nada hechos aislados. Para entenderlos en toda su amplitud se hace preciso tomar en consideración la realidad histórica en la que nos encuadramos y las circunstancias geoestratégicas en algunos puntos novedosas y otras ya presentes en tiempos recientes y no tanto.



Para comprender los sucesos recientes a los que nos referimos en primer lugar vamos a buscar las similitudes entre esta acción marroquí y la llevada a cabo por el reino alauí para hacerse con la provincia española del Sahara Occidental.



Hay unos aspectos similares entre lo acontecido en 1975 con la Marcha Verde y la posterior anexión-ocupación del territorio, entonces provincia española, del Sahara Occidental por Marruecos y la actual invasión, vestida de crisis migratoria de la ciudad de Ceuta.

Tanto en los acontecimientos que tuvieron lugar a mediado de los setenta como en los ocurridos hace unos días nos encontramos con que en ambos, los sátrapas marroquíes han aprovechado una situación de extrema debilidad de España para poner en marcha sus planes ofensivos y de conquista.

La situación de debilidad en 1975 la marcó el gravísimo estado de salud del General Francisco Franco, una situación esta que llevó a que el mando real sobre las fuerzas armadas y sobre la política exterior pasase a manos del entonces príncipe Juan Carlos. El entonces sultán de Marruecos sabía que con Franco en el poder el movimiento que pensaba llevar a cabo no hkubiese  tenido posibilidad alguna de éxito puesto que una respuesta militar contundente sería absolutamente segura y la entrega del Sahara algo impensable. Pero por el contrario contaba, con muy buen juicio, con que teniendo el mando militar y diplomático el Borbón la victoria de sus planes y el alcance de sus objetivos estaban poco menos que asegurados. Y esto era así debido a que si el entonces príncipe Juan Carlos quería asegurarse el trono a la muerte del Caudillo no se podía permitir un ejército victorioso amén de que debería plegarse a las presiones norteamericanas, aliados de Marruecos puesto que era EEUU el principal mentor de la presencia de Juan Carlos en la Jefatura del Estado español.



 De la misma manera, y con el mismo fin, el príncipe había negociado con los Estados Unidos en las denominadas conversaciones de Madrid una actitud pusilánime y entreguista respecto a la Marcha Verde que pondría en funcionamiento el monarca alauí para ocupar el Sahara Occidental. En el caso actual de la invasión de Ceuta la no actuación, ni siquiera presencia en la ciudad española del actual monarca, da lugar  a que pensemos en que la actuación real no variará  mucho respecto a la que tuvo el emérito.

De la misma manera la actitud de los Estados Unidos no sólo fué de mera no intervención en el conflicto, sino que de hecho tomó partido por Marruecos al no permitir al ejército español utilizar material bélico norteamericano en contra su aliado marroquí, de la misma manera puso a su servicio toda su maquinaria de inteligencia y espionaje para controlar a las unidades militares españolas e informar a Marruecos.

En el momento actual nos encontramos también con que se reproduce una situación de debilidad en nuestra nación, aunque por causas distintas, pero en las que parecen repetirse ciertas circunstancias. Ahora nos referiremos a ellas.

Una primera es la pandemia que mantiene asustado a la par que entumecido al pueblo español en lo que se refiera a hechos como esa paranoia que se han establecido y se continúan estableciendo de forma vergonzosa a través de los medios de comunicación al servicio del Sistema y los políticos a sus órdenes.  Este miedo inducido se convierte en algo paralizante, lo que frena toda reacción de la ya casi eliminada conciencia nacional y por tanto de su defensa.

Existe otro punto fundamental en lo que se refiere al miedo o temor que hasta cierto punto lleva a que la población nacional no fije toda su atención en los graves acontecimientos  de Ceuta, este segundo factor no es otro que el tremendo problema de la  Organización territorial de la  nación y concretamente en el peligro que en Cataluña existe de ruptura de la unidad nacional.

No conocemos aún si en la actualidad, o previamente a la invasión, se desarrollan o se han desarrollado algún tipo de negociaciones secretas entre la Secretaría de Estado norteamericana, representantes de la monarquía alauí y las autoridades españolas con el actual rey a la cabeza.  De hecho y dada la presente crítica situación   de la continuidad monárquica en nuestra patria la debilidad de esta favorecería cualquier pacto para recibir apoyo del “amigo” americano si de esta manera consiguiese su apoyo para que el monarca siguiese ocupando el trono.

Hay un aspecto que aunque también se dio en el caso de la Marcha Verde, a mi entender influyo   infinitamente menos en la resolución vergonzosa de aquel episodio.

Me estoy refiriendo a la concepción loable de considerar de una manera especialmente cuidadosa a la población civil y sobremanera a mujeres, niños y ancianos. Esta actitud resulta del todo encomiable e incluso ineludible siempre y cuando este sentimiento no termine convirtiéndose en un buenismo suicida, no podemos permitir que ese noble sentimiento sea utilizado por nuestros enemigos, como está ocurriendo, para paralizar toda respuesta por nuestra parte e incluso llevarnos a colaborar con sus planes, aunque esta colaboración no sea directamente voluntaria.

Esto a lo que se está haciendo referencia viene a ser lo que es la utilización de civiles y menores como escudos humanos, solo que en el   caso que nos ocupa la utilización de menores resulta más astuta si cabe.

En la situación  por la que atraviesa España y gran parte de los países europeos que lindan con el mar Mediterráneo nos encontramos con que muchos países del Magreb y subsaharianos, con la organización

Pero nunca hemos de perder de vista que el éxito de esos perversos que utilizan nuestros sentimientos más humanos y se sirven de inocentes para lograr sus objetivos se debe a nuestra incapacidad para hacer frente a sus subterfugios.  Hemos de tener muy claro que sus acciones son responsabilidad y que en ningún caso las consecuencias de ellas las podemos considerar culpa nuestra, hemos de plantear los elementos defensivos de manera que la acción resulte claramente  llevada a cabo por el enemigo y que la comunidad internacional lo vea así claramente, puesto que en la actualidad la guerra mediática es una parte fundamental de los enfrentamientos entre naciones.

El caso de Marruecos es paradigmático puesto que viene utilizando de modo miserable a su población civil y a los niños para conseguir los fines que se marca.

Ya lo hizo al crear la Marcha Verde, compuesta por decenas de miles de civiles desarmados que se dirigieron hacia la zona militarizada y minada que custodiaba la frontera de la provincia del Sahara. Después ha lanzado en numerosas ocasiones cientos de magrebíes y subsaharianos a saltar las vallas de     Ceuta y Melilla sabiendo que el buenismo reinante en España llevaría a retirar las concertinas y  movería a que no se utilizase material antidisturbios, y por supuesto los ha embarcado en barcazas  que difícilmente  flotaban en dirección a las costas españolas de Andalucía, Valencia, Baleares y últimamente  a Canarias. Siempre confiando que en el último momento les ayudarían a llegar a tierra las embarcaciones de rescate españolas.

En Ceuta ha ocurrido algo similar cuando la gendarmería marroquí dejó pasar, abriendo físicamente las puertas de la valla con España, a miles de civiles marroquíes en su mayor parte menores, muchos de los cuales habían sido sacados de los colegios engañados y sin contar con el permiso de los padres.

Debe quedar meridianamente claro que tanto en el caso de la Marcha Verde, de los asaltos a las  vallas de Ceuta y Melilla, como en los de las llegadas por mar de  inmigrantes ilegales a nuestras costas tratan  de aprovecharse de nuestros sentimientos  humanitarios más básicos para de esa manera frenar la acción de nuestras fuerzas militares o la retirada de los campos minados, como en la Marcha Verde, la retirada de las concertinas en las vallas, o el salvamento y  desembarco en suelo español de los que ellos mismos habían enviado.

De la misma forma buscan que en esta situación de crisis económica que padece nuestra patria sea ella la que se haga cargo de los miles y miles de M.E.N.A.s  , Menores No Acompañados, proporcionándoles  cobijo, alimento, ropa y cierta cantidad de dinero en mano. Mientras tanto la crisis económica lleva a que muchos de nuestros compatriotas tengan que vivir en condiciones miserables


De todo lo últimamente reseñado creo que se deducen, al menos así lo veo yo, ciertas cuestiones que a buen seguro serán tildadas de insolidarias e incluso de inhumanas.

Dado que, como hemos visto, el enemigo se sirve de nuestra compasión y humanidad para poder hacer daño a España y a los españoles.

Pues bien, si sabemos que esto es así, hemos de actuar en consecuencia y anular esas bazas de las que se sirven manipulando nuestra caridad y buenos sentimientos, pero hemos de hacerlo sin dejar de lado esa cariad compasiva que nos define moralmente.

  Siempre   que esté en nuestra mano   evitaremos herir o hacer voluntariamente daño a civiles, mujeres y menores especialmente. Lo que hemos de tener muy claro es que nuestra responsabilidad moral y humanitaria nos afecta única y exclusivamente en lo que se refiere a nuestras acciones y al daño voluntariamente infringido.


                                                     


 

Con esto debe quedar diametralmente claro que reconocemos la libertad de actuación de los otros y por lo tanto consideramos que los daños que sufran consecuencia de la toma de ciertas decisiones son responsabilidad únicamente suya.

Todo este planteamiento ha de servir para acabar con ese   buenismo patológico que está alojado en la sociedad española y que da lugar a decisiones tan ridículas y contraproducentes como retirar de las vallas de Ceuta y Melilla las concertinas, no colocar alambre espinado a todo lo largo de la playa e incluso minar ciertas zonas, las más utilizadas para saltar las vallas e invadir el territorio español.

Ha de quedar absolutamente claro que es el individuo el único responsable de los daños que pueda sufrir al optar pasar por un campo minado bien señalizado o al pasar por encima de las concertinas.   

En caso de seguir el razonamiento buenista seriamos responsables de los daños que sufren aquellas personas que optan por colgarse de una viga, por el mero hecho de tener colocada una viga en nuestra casa, o de los daños cerebrales de quién decide darse cabezazos contra la pared de un muro, responsables por haber levantado esa pared.

 

Siendo así que si tenemos clara la finalidad que es la salvaguarda de la integridad del territorio frente a posibles incursiones, la colocación de cualquier defensa pasiva, si es necesario convenientemente indicada, resulta plenamente aceptable moralmente.

                                              


 

Un último aspecto que ha de ser desmantelado, fruto también de ese buenismo suicida, es acabar con esa obligación autoimpuesta de acoger y mantener a todos los menores, y no tanto, que penetran de manera ilegal en nuestra patria.

Y más cuando tenemos certidumbre que esos menores están siendo introducidos en territorio nacional  de manera intencionada para que  un Estado, en este caso el marroquí,  no se ocupe de su manutención y cuidado, y dedique ese dinero a incrementar  la fortuna y propiedades del sultán sátrapa alauí, o lo que es peor para dotar a su ejército de  armamento  de ultimísima generación con el que en una supuesta confrontación   bélica poner en serio peligro  la defensa nacional.

                                     

                                          



domingo, 16 de mayo de 2021

PREMIO AL SATANISMO Y A LA PROMOCIÓN DEL MALTRATO INFANTIL.

                                                                             



Se ha producido un hecho que a mi parecer no ha sido considerado con la inmensa gravedad que tiene.

La gravedad a la que me refiero deriva sobre todo de las implicaciones que este acontecimiento lleva aparejado y a las consecuencias que del mismo podemos inferir.

Me estoy refiriendo a la concesión del premio princesa de Asturias de las Artes a la satanista y pedófila “artista” Serbia residente en Estados Unidos, Marina Abramovic.

Este premio que cuenta con cierto prestigio internacional, sobre todo en Hispanoamérica, y sin lugar a duda con gran prestigio nacional está estrechamente relacionado con la monarquía española. Lo que no es para nada lógico es que ese prestigio y la dependencia con ese símbolo de España haya premiado, lo que es lo mismo que aplaudido, la obra cuestionablemente artística, con claros mensajes satánicos y con una más que irrefutables mensajes de promoción y presentación del maltrato hacia menores.


                                                       



      





Las obras de esta “artista”, tanto las performances como sus pinturas, resultan de cuestionable calidad, y lo único que destacan los jueces es su capacidad rompedora y que abre nuevos caminos al arte. Ahora bien, no  todo romper con los caminos establecidos ha de ser considerado por fuerza digno de admiración, de aplauso o premio.


Si nos fijamos concretamente en el hecho de premiar la obra de Marina Abramovic resulta de todo punto asombroso que en una época absolutamente sometida a lo políticamente correcto se premie, y más a ese nivel, a la autora de obras claramente enfrentadas con la mujer y con los menores. Estas obras, me resulta muy difícil adjetivarlas de arte, destacan no por su calidad sino por resultar de mal gusto y ante todo perturbadoras.

A menos que se muevan oscuros, al menos ocultos, intereses detrás de esta concesión del premio resulta sumamente difícil entender que la corona haya dado el placet a la concesión  a esta del premio Princesa de Asturias para las Artes.

 

Para todos aquellos que no conozcan la obra de esta “artista” pongo a continuación una serie de fotografías que muestran la obra, pictórica e interpretada, de esta verdadera activista del mal gusto, del satanismo, del maltrato infantil y movilizadora de la perturbación de los más básicos sentimientos humanos.


                                                       

Cuadro llamado:  Destripadores.

 

A la hora de conceder cualquier premio, sobre todo si tiene la importancia y repercusión de este, resulta sumamente importante tomar en consideración la historia personal del premiado, en este caso el pasado  personal de Marina Abramovic. En este caso  es sumamente importante dado que su trayectoria se ve jalonada de toda una serie de escándalos y acusaciones públicas de gran importancia.

En este aspecto el currículo de Marina Abramovic no le hace precisamente atractiva para concederle un premio de la significación pública del que nos ocupa, y es que   los antecedentes que presenta su historial mueven especialmente al escándalo y a la controversia, que es algo que a todo precio busca evitar este tipo de premios.

Comenzaremos diciendo que esta “artista” ha sido acusada de estar relacionada con   elementos y grupos acusados de pederastia y tráfico de menores. En este caso nos encontramos con compañías tan escandalosas como los hermanos Podesta, Jeffrey Epstein, James Alefantis y la misma Hilary Clinton. De la misma manera tenía expuestos algunos de sus cuadros más perturbadores en  tristemente famoso Comet Pizzza.


                                                



Es así que habría realizado para estos y para todo un submundo poco menos que depravado y amante del mal gusto sus famosas performances, en las cuales hace simulaciones muy reales de canibalismo, presenta numerosa simbología satánica y juega con sangre sobre estatuas y figuras de menores.                                       


 

Como se ha podido ver en lo señalado a lo largo del presente escrito se dan todas las circunstancias para no conceder este premio a semejante bruja puesto que estos precedentes resultan más que suficientes para que no se llevase a cabo esta concesión.

La pregunta nos viene de manera automática a la mente, ¿Por qué razón entonces se le concede el premio esta “artista”

La contestación a esta pregunta no puede ser si no una especulación pues no estamos en la mente de aquellos que se han decidido por otorgarle el premio. Esta contestación tendrá mayor o menor verosimilitud, pero no dejará de ser una especulación.

 

Ahora bien, como tenemos la seguridad, y más en estos momentos tan comprometidos para la monarquía, de que la  institución monárquica  no buscará la controversia ni el enfrentamiento con una parte de la población que pudiera estar de su lado. Siendo así la cosa veo muy difícil  que el nombre de la familia real se viese mezclada con el aplauso a una satánica cruel con los menores.

 Entonces hemos de deducir que el haber tomado semejante decisión ha de deberse a presiones externas muy poderosas y que estén por encima incluso de la voluntad de los mismos reyes.

Sólo la amenaza y el chantaje pueden llevar a adoptar decisiones claramente contrarias a los propios intereses. Cada uno que saque sus propias conclusiones.