Estamos en
un mundo globalizado en el cual la comunicación está absolutamente
generalizada, un mundo en el que las noticias y sucesos llegan a los lugares
más apartados de los países más pobres y alejados. Y es que gracias a internet
y a los satélites las noticas que aparecen en las televisiones, radios y prensa
digital alcanzan de modo inmediato incluso a aquellos que viven en el África
subsahariana, en Oriente Medio o en las zonas montañosas de Pakistán e India.
Todo lo
arriba señalado pretende poner de manifiesto que lo ocurre en los países de
Centroeuropa y en los nórdicos no pasa en absoluto desapercibido para la
población del denominado tercer m mundo.
Siendo esto
así hay ciertas noticias, como es la que vamos a referir en esta entrada que llevarña causan una impresión en los que la reciben, impresión que a su vez le moverá a
actuar de determinada manera, me refiero por supuesto a la toma de decisiones
tales como emigrar a nuestro continente, aún arriesgando sus vidas al cruzar el
Mediterráneo.
Haremos
referencia directamente a la noticia en cuestión, pero me gustaría que en primer lugar el
lector se pusiese en el lugar de alguien que vive en un poblado de una zona del
África subsahariana en el que, aún sin pasar hambre, ha de trabajar para
sobrevivir y que aun así ve a través de la televisión o de los medios de
internet que su trabajo no le proporciona las prestaciones sanitarias y
sociales de las que disponemos en Europa. Si a estas personas las imágenes y noticias les convencen de que llegando a nuestro continente podrán vivir mejor y sin tener que trabajar no dudarán en emigrar hacia ese supuesto paraiso.
Muchos
argumentarán que una gran parte de esa población no tiene posibilidad de acceder
a los medios de comunicación, a esta afirmación hay que contestar que la recepción de los medios está mucho más generalizada de lo que en principio podemos suponer, y que las mafias que se lucran con el traslado de inmigrantes africanos
hacia Europa son los que les hacen
llegar tales informaciones y les
permiten ver el nivel de vida Europeo.
Pues bien,
si una familia africana o de cualquier otra parte del tercer mundo recibe
informaciones como la que voy a reseñar resulta absolutamente claro que buscará la forma de llegar a Europa, aunque
sea cruzando el Mediterráneo o saltando verjas
como la de Ceuta o Melilla.
Y ha de quedar bien claro que los verdaderos responsables de que tantos inmigrantes mueran ahogados en el Mediterráneo, perezcan
abandonados por las mafias al cruzar África y Medio Oriente o resulten heridos
al saltar las verjas de Ceuta y Melilla no son otros que aquellos que con su buenismo
suicida da unas ayudas sociales y dotan de vivienda a todo inmigrante ilegal
que arribe a su país.
Un ejemplo
claro y vergonzoso lo encontramos en una información de la que se ha hecho eco
la televisión alemana TV Spiegel) al entrevistar a un sirio musulmán analfabeto
que se declara gran admirador de “mamá Merkel” (no te j…, le regala y permite
todo).
Pues bien,
este inmigrante no sólo vive mejor que los pobres que haya en Alemania, sino
que lo hace mejor que muchos miembros de la clase media, y es así dado que ellos
han de hacer frente a pagos a los que este sujeto y su familia no han de afrontar,
y esto es así pues el pago lo hará el Estado Alemán, es decir los
contribuyentes alemanes.
Paso a
referir las circunstancias concretas que se dan en este caso, caso que para nada es
extraordinario. En él se muestra claramente un planteamiento pazguato que permite
ver como en algunos países occidentales se ha desarrollado una pérdida total de
respeto hacia la población originaria y la legislación que las rige.
Los puntos concretos de este caso son conocidos merced a la entrevista realizada por la citada cadena de televisión
alemana TV Spigel, en ella asistimos a como un inmigrante analfabeto sirio musulmán afirma tener
tres esposas, una de ellas de 13 años, dos en Alemania y la otra en Siria,
afirmando que espera casarse con una alemana para así redondear a cuatro (o
conseguir la nacionalidad de manera automática con los beneficios que ello
conlleva). El inmigrante, no sabemos si legal o ilegal, tiene seis hijos,
aunque afirma que pasen a ser veinte. Vive en un apartamento costeado por el benefactor
y suicida Estado alemán, aunque el sirio señala que se le queda pequeño en la
actualidad y que cuando tenga más familia será imprescindible que le paguen
otro apartamento con más habitaciones o varios apartamentos.
Pero no
acaba aquí la desfachatez del inmigrante ya que Ahmad, que ese es su nombre,
afirma que no quiere trabajar ni aprender alemán, que prefiere estar con los
niños, el es perfectamente consciente de que todo esto le proporciona una vida
de verdadero lujo.
Los
periodistas de TV Spiegel, lejos de dar muestra de un pensamiento y análisis
minimamente crítico se refugian en el pensamiento único de lo políticamente
correcto para señalar que nos encontramos ante ·la visión de otro” que tiene
otras normas y valores, para terminar diciendo que al igual que todos lo único
que busca el inmigrante usulmán musulmán es la felicidad (que boniiito).
Ahora bien,
si los periodistas del flower power y del t´ol mudo es güeno, olvidan que todos
los alemanes están pagando la vivienda a un inmigrante que ni quiere trabajar
ni pretende aprender el idioma del país que le acoge con tanta solicitud, del
mismo modo parecen olvidar que la bigamia está, al menos por ahora,
prohibida en Alemania y que casarse con una menor también es delito.
Si en su
inconsciencia quieren suicidarse poniendo en peligro de muerte su nación y su
identidad que lo hagan, a lo que ningún país tiene derecho es a provocar un “efecto
llamada” que traiga a nuestro continente a
millones de inmigrantes ilegales procedentes de África y de Medio
Oriente, inmigrantes que acabarán con nuestra identidad cultural, religiosa y
racial, una invasión que terminará por sustituir a la población blanca de
Europa.