Terrorismo en África, intereses occidentales y China.

                                                                         

Nuevamente la prensa internacional ha ocultado el dato fundamental de una noticia, que es lo mismo que mentir.

En este caso la información manipulada hace referencia  al secuestro, el 14 de Abril del 2014, de más de 200 jóvenes de entre 16 y 18 años por el grupo terrorista de corte salafista Boko Haram.

La manipulación informativa ha consistido en pasar por alto el hecho de que 150 de las 200  niñas secuestradas fuesen cristianas.

Quizá el origen cristiano de la inmensa mayoría de las secuestradas es lo que ha dado lugar a que hasta hace unos pocos días  la comunidad internacional no haya reaccionado de un modo clamoroso,  esperemos que contundente, ante tan  abominable acto.

Esta ocultación del verdadero objeto del secuestro, que no es otro que imponer la Sharía y hacer desaparecer todo vestigio cristiano de las zonas donde actúa Jama ´atu Ahlis Sunna Lidda´awati wal- Jihad (Pueblo comprometido con la propagación de las enseñanzas y yihad del Profeta), nombre oficial de Boko Haram. En el caso del secuestro que nos ocupa la finalidad es aterrorizar a  la población para que se implante la Sharía y obligar a las niñas a que abracen el Islam renegando de Cristo.

Las zonas que este grupo amenaza son Nigeria, el norte de Camerún y de Niger, Mali y Chad.

En un primer momento las agencias de prensa y los medios de comunicación señalaron que  la  intención de Boko Haram  era luchar contra cualquier tipo de enseñanza occidental distinta a la islámica, pero como se ha podido ver esto no era así.

El dirigente del grupo terrorista, Abubakar Shekau ,  mostró en un video emitido por la BBC  a  unas 130 de las más de 200 secuestradas vistiendo el tradicional velo musulmán, niyab, sentadas en el suelo recitando versículos del Corán. El citado terrorista decía que las niñas se habían “convertido” al Islam.

La comunicación a   través de los medios de “información” de que el odio anticristiano es el origen del secuestro podía dar al traste con esa parte del pensamiento políticamente correcto que  tanto habla de la convivencia armónica entre las distintas religiones, de la bondad de la multiculturalidad, y que señala al Islam como una religión de paz con la que nuestras sociedades se renriquecerían.

Además de la consecuencia antes apuntada, dar a conocer la finalidad anticristiana del secuestro podría dar alas a los grupos identitarios que van surgiendo en Europa como respuesta a una inmigración masiva y a la progresiva pérdida de identidad de las distintas naciones.

Pero lo que resulta más peligroso para la casta política que nos “gobierna”, es que esto podría poner en peligro la continuidad del status quo  de los partidos clásicos y del chiringuito de la UE.

Con todo esto se entiende muy bien el porqué  del silencio antes señalado.

Pero todo lo que se relaciona con la actividad del grupo terrorista Boko Haram tiene una complejidad mucho mayor de lo que en un primer momento pudiera parecer.

En primer lugar resulta  chocante que el grupo terrorista reciba financiación de Arabia Saudí y del Reino Unido, tal y como señaló en 2012 el periódico The Nigeriam Tribune.

La información que facilitó  el periódico nigeriano era muy específica.

Cuando señaló que el dinero Saudí les llegaba desde un fondo llamado Al-Muntada Trust Fund.

En el año 2005, The Center Security Policy indicó que Al-Mutada de manera activa actuaba para fomentar el islamismo wahabista en Nigeria.que clérigos nigerianos acudiesen a universidades  saudíes y después adoctrinasen  a los musulmanes, radicalizándolos, a través de una bien preparada red de mezquitas y escuelas-madrasas.

Del mismo modo Arabia Saudí financió la implantación de numerosas madrasas en Pakistán  mientras se desarrolló la guerra encubierta de la CIA en contra de la Unión Soviética en Afganistán.

Según el especialista Phil Gasper entre 1982 y 1992 cerca de 35.000 musulmanes radicales procedentes de 43 países islámicos, de Medio Oriente, África del Norte y Este, Asia Central y del Lejano Oriente  entraron en combate en Afganistán, llamados en círculos islamistas radicales “los afganos”.

Según Gasper,  esos mismos que entrenó la CIA y armó Arabia Saudí posteriormente se convertirían en lo que hoy se conoce como Al Qaeda, talibanes, de los que se sirvió USA y la OTAN para luchar contra el régimen de Gadafi y en la actualidad en Siria luchan contra Bachar el- Assad.

Hasta aquí el apoyo recibido por Boko-Haram de parte de Arabia Saudí.

Pero el grupo terrorista también recibió apoyo de la OTAN por medio de mercenarios  de Al Qaeda en Libia.

Abu Mousad Abdel Wadoud, líder del AQIM (Al Qaeda del Magreb Islámico)señaló en una entrevista concedida a la cadena de televisión Al Jazeera que las organizaciones establecidas en Argelia proveyeron de armas al movimiento terrorista nigeriano  Boko Haram, según Abdel Wadoud para defender a los musulmanes en Nigeria y detener el avance de los “cruzados”.

Es un hecho comprobado que  miembros de AQIM y el LIFG (Grupo Combatiente Islámico Libio) combatieron juntos para derrocar a Muammar Gaddafi,  ambos recibieron armas y apoyo logístico de la OTAN durante el conflicto de 2011, esta información la  atestigua Nile Bowie, comentarista político que escribe en RT, Russia Today.

Es ciertamente llamativo que los mayores aliados con los que cuentan los EEUU, si no contamos Israel claro,  apoyen  de manera directa o mediante elementos interpuestos a un grupo que en Octubre de 2013 la misma USA había calificado como grupo terrorista.

 Pero como hemos tenido ocasión de comprobar en numerosísimas ocasiones, es entre bambalinas donde la geopolítica dirige los acontecimientos, haciendo extraños compañeros de cama.

En el caso que nos ocupa hay varios elementos que se han de tomar en consideración para poder entender lo que ocurre en el  escenario africano en general y nigeriano en particular.

Nigeria es el décimo tercer productor de petróleo mundial, incluyendo entre sus recursos gas natural, estaño, mineral de hierro, carbón, zinc y gran cantidad de tierras de cultivo.

Y es aquí donde  entra en escena la lucha económica que se está desarrollando en África entre la emergente superpotencia china y los Estados Unidos y Francia.

                                                               

Los Estados Unidos y Francia pretenden implantar una serie de gobiernos títeres en el continente africano  que pongan freno a la cada vez mayor influencia económica y diplomática de China en África.

El hecho es que AQIM y Boko Haram representan una amenaza mucho menor para los Estados Unidos en África que la que representa China.

Tal y como escribe el periodista y analista Timothy Alexander Guzmán:

“Los gobiernos de Estados Unidos y Francia quieren asegurarse de que el nuevo liderazgo chico no continúe su beneficiosa relación con las naciones ricas en recursos de África, la cual ha sido exitosa en el pasado. Por ende la “guerra contra el terrorismo” creará inestabilidad e interrumpirá el crecimiento económico de China. La misión de AFRICOM es crear una guerra en nombre del combate al terrorismo”

Es así que tanto los apoyos, directos o indirectos, a grupos terroristas y las acciones de estos pueden formar parte de  las “excusas” para intervenir militarmente e imponer gobiernos títeres que frenen la expansión del gigante asiático en el continente africano.

                                                                         

De nuevo la ambición  por el poder de los sionistas  que dominan los Estados Unidos y la de  sus lacayos de la Unión Europea colocan sus intereses económicos y de dominio por encima de la civilización occidental, de la identidad de las naciones y del futuro de los  pueblos que antaño constituyeron la Cristiandad.

Aunque se tengan que  aliar con el diablo, los yihadistas, para alcanzar sus intereses mundialistas y de  dominio mundial los servidores de Sión no lo dudarán un segundo.
Basta con mirar como  EEUU y la UE se sirven de los salvajes cortacabezas anticristianos para derrocar a Bachar el -Asssad en Siria, y otro tanto hacen en África apoyando  a AQIM y a Boko Haram.

Sólo les importa el dominio mundial y les mueve la soberbia de creerse parte del "pueblo elegido" o servidores de estos.

La civilización occidental para ellos no tiene valor. Lo único cierto es que sin la filosofía griega, el derecho romano y la fe cristiana no hay civilización, todo es barbarie. Pero para los que miran a  los habitantes de la tierra como a meros animales que han de ser sometidos todo lo que no sea ser los dueños   carece de sentido. 

Da igual aliarse con el enemigo, sumir a la gente en la miseria moral y física, golpear una y otra vez con atentados de falsa bandera o hacer de la mentira la norma, lo único importante para los dueños del mundo es el dominio total de la humanidad.