sábado, 16 de febrero de 2019

Lo que se esconde tras los ataques contra la Iglesia por el tema de la pederastia.



Desde hace cerca de diez años se ha montado y se viene desarrollando un discurso basado en una manipulación  plenamente sometida al pensamiento políticamente correcto.
Este discurso no es otro que el que hace referencia a la pederastia en la Iglesia, un discurso que a base de ser repetido ad nauseam ha conseguido que la mayor parte de la población haya terminado por identificar   la Iglesia católica con el abuso sexual de menores.

                                                                 

Y digo que se ha creado y extendido un discurso sometido a lo políticamente correcto puesto que continuamente se ha venido manipulando la realidad de los hechos creando una narrativa falaz en la que una de las instituciones más odiadas y perseguidas por el pensamiento políticamente correcto del Nuevo Orden Mundial, la Iglesia católica, ha sido sometida al mayor de los escarnios posibles. Mientras que por otro lado esos mismos qe acusan a la Iglesia por pederastia han obviado cualquier crítica a uno de los movimientos a su servicio, el homosexualismo, sin  tomar en consideración la responsabilidad y culpa en esos mismos hechos  utilizados para atacar a la Iglesia.
En otras palabras, se ha buscado presentar una realidad que no existía mediante la ocultación de la realidad existente que afectaba a otra parte, con todo ello se buscaba, y se ha conseguido, culpabilizar a los primeros.


Dejando de lado esta elucidación hasta cierto punto abstracta, que no falsa, pasamos a concretar la realidad de la cuestión a la que estamos haciendo referencia.
La iglesia católica lleva décadas siendo acusada de ser responsable de centenares de casos de pederastia llevados a cabo por sacerdotes, catequistas, obispos e incluso por algún arzobispo. Ha sido así mismo acusada de haber encubierto gran cantidad de esos casos tras haber recibido denuncias o haber tenido conocimiento de los abusos antes señalados.

Siendo totalmente cierto que ha habido numerosos casos de abusos de menores por parte del clero, no lo es menos que el número de estos resultan ser muy similar e incluso menor al que son llevados a cabo por entrenadores de natación, gimnasia o artes marciales, por profesores o por monitores de campamento.

La realidad es que no por haberse dado estos casos de abusos pederastas los gremios de profesores, entrenadores o el conjunto de los monitores han sido estigmatizados grupalmente, cosa que si ha ocurrido al referirse a la Iglesia y a sus miembros.

Con este comentario no pretendo restar un ápice de gravedad a los sucesos reseñados ni rebajar lo más mínimo el castigo que se merecen los depravados y cobardes seres que han sido capaces de agredir en lo más íntimo a lo más indefenso y puro de la humanidad, a los niños.
Lo único que he procurado es poner de manifiesto como se ha utilizado este tema para generalizando casos concretos atacar a la Iglesia Católica.

Del mismo modo voy a referirme a un hecho que se ha ocultado y voluntariamente se ha pasado por alto debido a que  su conocimiento público situaría la gravedad de los hechos arriba citados en un nivel menor que el antes explicitado en lo referente a la Iglesia, del mismo modo centraría la atención de la opinión pública  no tanto en la pederastia cuanto en la homosexualidad, algo que la corrección política y los planes del Nuevo Orden Mundial no pueden permitir puesto que el movimiento L.G.T.B.I. es una creación suya para modelar a la sociedad a través de una ingeniería social de la que el movimiento homosexual es pilar fundamental.

Todo esto se concreta en que la inmensa mayoría de los abusos sexuales que se dan en la iglesia no se refieren realmente a pederastia, puesto que las víctimas de esos abusos no son niños o preadolescentes, con lo que realmente no estaríamos hablando de pederastia sino de homosexualidad centrada en efebos (adolescentes o jóvenes) que podríamos categorizar como efeborastia, y perdón por el palabro.
Siendo así que la mayor parte de las denuncias y casos de los que se hacen eco los medios de comunicación son abusos sexuales de que han sido objetos púberes en campamentos, catequesis y jóvenes seminaristas. 

                                                                

Estaríamos por tanto ante un problema de homosexualidad en la Iglesia, cuestión esta realmente seria puesto que todo aquel que tenga un mínimo de conocimiento  respecto de lo que acontece en los niveles medios y altos de la jerarquía católica sabrá que en la actualidad el lobby gay en la Iglesia tiene un tremendo peso, un peso tal que lleva a que determinadas conferencias episcopales de Centroeuropa y de Centro y Norteamérica  mantengan posiciones muy poco ortodoxas respecto a la moral y a la posibilidad de personas con tendencia e incluso práctica homosexual accedan al sacerdocio.

                                                             




                                                                  
Sacerdote católico polaco con su pareja, el sacerdote es oficial de la congregación para la defensa de la fe (¡!)


Gran parte de esta homosexualización de la Iglesia es consecuencia de la infiltración en los años 50 y 60 de los seminarios de individuos con mentalidad marxista cuando no directamente comunista.
 Esta infiltración buscaba, y ha logrado, acabar con la teología y moral católica tradicional para así poder someter con facilidad a la sociedad mediante la ingeniería social que ahora sufrimos y que creará una sociedad sin valores y basada tan solo en principios meramente liberales.

                                                                 


Antes de terminar este escrito quiero reiterar mi condena sin paliativos a esa degeneración que son los abusos sexuales contra niños, la pederastia no tiene perdón alguno y sobre los culpables debería caer la mayor de las penas, la pena capital que por desgracia ahora no está contemplada en nuestro código penal.

                                                               




La posición del actual ocupante de la silla de S. Pedro no facilita precisamente la claridad respecto a este asunto.

                                                             

1 comentario:

  1. Los curas , sacerdotes , obispos y demás , son personas como las de cualquier otro gremio . Entonces los hay buenos malos y regulares . Donde quiero llegar es al pricipio de la religión católica donde por ejemplo esta comprobado que los 12 apóstoles estaban casados y hay persdonas que aseguran que el mismísimo Jesús también llego a casarse , no lo se . Lo que si se sabe también es que en los primeros años del cristianismo , estaba permitido casarse a los predicadores de la Palabra de Dios y también había predicadoras ,comprobado . Fue mas de un siglo después de la muerte de Cristo cuando en un concilio prohibieron casarse a los curas y también que las mujeres fueran predicadoras . Traicionando asi el mensaje de Jesucristo . Y asi , hasta nuestros días donde el mensaje de Jesús ,se ha ido distorsionando paulatinamente hasta ser lo que es en la actualidad , un sucedáneo del mensaje original . A mi no me entra en la cabeza que Jesús muriera sin ninguna riqueza osea, pobre , y los cardenales y jerarcas de la iglesia vivan rodeados de lujos y tengan miles de millones en bancos , en vez de quitar el hambre del mundo , por ejemplo .

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