En estos
momentos estamos asistiendo a lo que sin duda alguna es el más grave y peligroso
ataque que nuestra nación ha sufrido a lo largo de su bimilenaria historia.
Y resulta
tan sumamente grave debido a que se está llevando a cabo deliberadamente desde
instancias gubernamentales y con el beneplácito, o al menos con el silencio
cómplice, de gran parte de la población española, también lo es debido a que el
blanco de dicho ataque es la línea de flotación de toda sociedad que se precie
ser considerar tal, esta línea de flotación no es otra que la población
infantil. A saber, el futuro de la nación, la parte más débil e influenciable y
aquella de cuya integridad depende su continuidad.
Los menores
están siendo sometidos a toda suerte de perversiones morales y hasta físicas
implementadas bajo una mal disimulada cortina de legalidad y una justificación
democrática que nada justifica, como si ello cambiase la realidad perversa e
inmoral de los actos que contra los menores se promueve en los centros
educativos y medios de comunicación.
Además de
los casos de perversión que se llevan a
cabo en las denominadas actividades extraescolares: conferencias llevadas a
cabo por hombres vestidos de mujer
presumiendo de su perversión, promoción de juegos y caricias sexuales entre
menores, invitación a que niñas toquen los genitales de hombres desnudos y un
largo etcétera. Además nos encontramos con que la Ministra de Educación Isabel Celaá se
ha descolgado con unas declaraciones
realizadas durante una entrevista concedida al periódico “ EL Correo”, que
recoge la agencia de noticias Europa Press.
En estas declaraciones señala que
“los padres no tienen derecho a elegir la educación de sus hijos en función de sus
convicciones religiosas y morales” afirmando que “no se puede confundir la
patria potestad con la propiedad”
La ex
portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, llegó a asegurar que “No podemos
pensar de ninguna de las maneras que los hijos pertenecen a los padres”.
Esta
terrible y falaz afirmación se basa en la voluntaria confusión entre
pertenencia de los niños y la potestad de los padres sobre ellos, con esto se
olvida que el papel del Estado es subsidiario
al de los padres y las palabras de la ministra llevan aparejadas que la propiedad
o potestad sobre los hijos es del Estado, estamos ante el pensamiento soviético
que consideraba a los colegios y centros de formación como campos de
reeducación y fábrica de almas, en otras palabras
ideologización y creación de esclavos de
los principios del Estado comunista.
El gobierno del
okupa de la Moncloa, Pedro Sánchez, se siente con tal poder e impunidad que como
vemos muchas de sus ministras y altas funcionarias están sacando a la luz
pública toda una serie de planteamientos totalitarios que, a través de la
perversión de los menores, la lucha contra la Iglesia y la subversión de los valores
morales están poniendo en serio riesgo la continuidad de la nacional y de su
identidad, por no hablar de la libertad de todos.
Pero la
desfachatez y falta de cualquier tipo de vergüenza y moral lleva a
declaraciones como las realizadas por la directora general de Diversidad Sexual
y LGTBI, Boti García.
La cual confesó al vicepresidente Pablo Iglesias en una
entrevista del programa “Otra Vuelta de Tuerka” que había mantenido una
relación con una menor de 17 años
cuando ella era profesora.
Todo estas
declaraciones que se vienen realizando de manera impúdica y provocativa por
parte de autoridades, así como los truculentos y vergonzosos sucesos relacionados
con la pederastia que de manera coordinada, generalizada y repetitiva se vienen
publicitando son parte de un cuidadoso
proceso que se lleva a cabo para
desarmar moralmente a la sociedad para que de esta forma sea mucho más
fácil de dominar y moldear. De igual manera se hizo con la imposición del
aborto y la legalización de denominado matrimonio homosexual.
La
diferencia está en que ahora el ataque se realiza contra lo más inocente y
necesitado de protección que es la infancia.
Este ataque
a las convicciones más profundas de todo ser humano y que conforman lo más
íntimo de la nación, pues se encuentran en la
base de su ADN identitario, coinciden
“curiosamente” con ese otro gravísimo ataque a la integridad territorial
de España, por supuesto me estoy refiriendo al intento de secesión que llevan a
cabo los nacionalistas catalanes. En estos casos tengo la absoluta certeza de que
la coincidencia no es casual. De hecho, estoy convencido que en cuestiones
políticas de cierto nivel las coincidencias no existen.
Como en
tantos otros momentos críticos que se han dado a lo largo de la dilatada
historia de nuestra patria nos corresponde a los españoles de esta generación combatir
la ofensiva de la que está siendo objeto España, y no nos podemos permitir el
lujo de la derrota, puesto que ella llevaría aparejada su muerte. Y como todos
sabemos si luchamos podemos perder, pero si no lo hacemos ya hemos perdido.
En definitiva,
hemos de mantener en alto las banderas.
Desde Argentina, apoyo totalmente el articulo, y solo me quedaría añadir, que lo que está ocurriendo en España es un problema, no sólo de los españoles, sino de todo Occidente. La perversion moral, las locuras, la legalizacion de las peores perversiones, la "normalizacion" y la aprobacion de aberraciones sexuales, bajo pretexto del respeto a los derechos humanos, no son sino el ataque mas feroz y desembozado a todo OCCIDENTE, a la civilizacion que lo forjo, la Cristiana. Creo que ni en los sueños mas negros de nuestros ancestros, ellos pudieron entrever, una situacion tan horrible como la presente. En estos momentos, nos queda resistir, orar, practicar una resistencia por activa y por pasiva, y esperar que Dios, rescate a sus hijos de este contexto verdaderamente oscuro y demencial.
ResponderEliminarAngelika, no puedo estar más de acuerdo con todo lo que dices, ojalá que esta podredumbre que ahora nos ocupa no llegue a la nación hermana de Argentina. Realmente sólo veo una solución a esto a través de una intervención divina a través de la movilización de los católicos y siempre que el despertar de los españoles se vea apoyado por Dios, porque no veo otro caminol
ResponderEliminarTOTALMENTE DE ACUERDO CON VOSOTROS
ResponderEliminarA pesar de que en la actualidad parece que la Fé católica se está extinguiéndo , en el futuro asistiremos a un renacimiento casi milagroso de la misma, numerosas profecías así lo anuncian, y con ello la salvación de España. Es esta una esperanza sobrenatural que nos ha de llenar de ánimo a todos los patriotas ya que si solo tenemos una visión puramente humana y terrenal de los acontecimientos,fácilmente podemos caer el desaliento, sobre todo porque vienen tiempos muy difíciles.