lunes, 5 de noviembre de 2018

La U.E., la O.N.U. y Soros pagan la invasión.


                                                                             


Aunque intuyésemos la respuesta no dejábamos de preguntarnos por la manera en que los inmigrantes ilegales que arriban a nuestras costas o fronteras terrestres financiaban su llegada y conseguían el dinero para pagar a las mafias que los trasladan, los gastos de comida, la vivienda y algunos elementos accesorios con los que se les ve paseando en grupo por nuestras calles.
La pregunta es más que lógica dado que por experiencia sabemos que el dinero no crece en los árboles ni lo traen las olas del mar, sino que es fruto del trabajo y el esfuerzo. Y sin dinero las mafias que los trasladan a Europa desde el Magreb o desde la zona subsahariana no mueven un dedo por nadie.

                                                                    


                                                        

Es cierto que una vez que han llegado a nuestras costas, el buenismo y la estupidez suicida de nuestras autoridades se hace cargo de la mayor parte de los gastos de alimentación y vivienda. Pero aun así hay gastos que los inmigrantes ilegales hacen que no se explican gracias a las ayudas económicas oficiales o por las recibidas por parte de asociaciones caritativas civiles o religiosas que tan alegremente les donan.

                                                                        

Lo que en primer lugar no se explica es de donde procede el dinero necesario para hacerse con los servicios de las mafias que les facilitarán el transporte, ya sea marítimo o terrestre, para llegar a las fronteras o aguas jurisdiccionales de los países europeos en los que pretenden entrar de manera absolutamente ilegal.
 No hay que olvidar que la cantidad de dinero que estas mafias les cobran no en absoluto despreciable, y menos aún para las economías de sujetos que emigran de sus tierras por problemas económicos.
En segundo lugar, hemos de considerar los gastos de comida, vivienda y desplazamiento una vez que han sido abandonados por las mafias que les han transportado, estos son más fáciles de explicar por las ayudas sociales gubernamentales y privadas que reciben.
Y por último nos hemos de preguntar por la forma en que hacen frente al pago de todos esos elementos que para nada son fundamentales para llevar una vida digna, elementos tales como móviles de última generación, gafas de sol, auriculares o ropa nada barata. De hecho, muchos de estos esos complementos una gran cantidad de españoles no pueden disponer de ellos debido a su situación de desempleo o por atravesar situaciones cercanas a la pobreza.

Pues bien, según informaciones aparecidas en el medio esloveno Nova 24 tv, la respuesta a esas cuestiones se asemeja mucho a lo que todos pensábamos, pero la respuesta   es más grave de lo que podíamos imaginar.   

                                                                  


Según la información aportada por este medio esloveno los inmigrantes ilegales estarían recibiendo tarjetas de débito preparadas especialmente para financiar su viaje a los países de la Unión Europea y estarían siendo financiadas por la Unión Europea, por A.C.N.U.R y por George Soros a través de la Open Society y de las O.N.G.s a su servicio, de hecho en las tarjetas de débito que se encuentran los logos de A.C.N.U.R (UNHCR siglas en inglés): Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y de la Unión Europea, además del de Mastercard, en estas tarjetas en lugar de aparecer una identificación por el nombre del sujeto aparece tan solo un número, de esta manera no es preciso identificar a los inmigrantes ilegales tan sólo  se apoya a los que tratan de llegar a Europa de manera irregular.

                                                                 


Mastercard, que es la empresa administradora de dichas tarjetas, ha señalado que las tarjetas se destinan a la compra de alimentos y que su función es por tanto meramente humanitaria.
Pero resulta absolutamente imposible controlar si el gasto que realizan los sujetos con esas tarjetas se circunscribe exclusivamente a comida o si con ella se compran gafas de sol, móviles o lo que les venga en gana.
En declaraciones a Kamenjar agentes de fronteras de la policía croata han señalado recientemente que: “tienen calzado nuevo, ropa nueva, teléfonos de última generación e incluso algunos cuchillos y machetes. Sabemos que sacan dinero de cajeros, pero no sabemos quién los paga”.
Después de las investigaciones periodísticas y policiales ya se sabe: Naciones Unidas, Soros y todos los europeos.
 Ciertamente la información que presenta el medio esloveno se centra en aquellos inmigrantes ilegales que acceden a Europa a través del camino de los Balcanes  y el Cáucaso, pero esto no es óbice para pensar que este original y práctico medio no sea el mismo del que se sirvan los globalistas como Soros y todas sus asociaciones “humanitarias”  para que los inmigrantes ilegales lleguen  al sur de  Europa y puedan sobrevivir un tiempo disponiendo de un remanente de dinero tras haber pagado a las mafias que los han trasladado  por tierra y mar.

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