Algunos
medios de comunicación nos han pretendido vender que el hecho de que el ejecutivo haya logrado
que el dirigente popular Angel Carromero, condenado a 4 años de cárcel
en Cuba por homicidio imprudente, fuese
repatriado para cumplir en nuestro país la condena ha sido un gran logro.
No hay que obviar que se le extraditó para cumplir la condena en nuestro país y en cambió está a punto de recibir el tercer grado, lo que le permitirá ir a dormir a su casa. Esto puede parecer no tener una excesiva importancia, pero si lo tiene puesto que para ulteriores repatriaciones de presos para cumplir en nuestras cárceles las condenas pueden ser un gave escollo.
No hay que obviar que se le extraditó para cumplir la condena en nuestro país y en cambió está a punto de recibir el tercer grado, lo que le permitirá ir a dormir a su casa. Esto puede parecer no tener una excesiva importancia, pero si lo tiene puesto que para ulteriores repatriaciones de presos para cumplir en nuestras cárceles las condenas pueden ser un gave escollo.
La presentación de esta repatriación como un logro ha sido así publicitada por
medios afines al gobierno y próximos a posiciones derechistas, mientras que el
resto de medios han guardado un prudente
silencio.
Antes
de continuar, y con el fin de que el desarrollo de lo que aquí se expone pueda
dar lugar a malos entendidos o a juicios equívocos e interesados, he de señalar
con toda claridad mi oposición rotunda al régimen totalitario castrista, el
cual considero opresor del pueblo cubano y
al cual rechazo por comunista, ateo y anticatólico.
Ahora
bien, la realidad autoritaria y opresora
del régimen no lleva aparejado forzosamente que las acusaciones de conducción temeraria y exceso
de velocidad con resultado de muerte
hayan de ser falsas. La verdad es la verdad, la diga Agamenon o su
porquero.
Nos
encontramos además con que el historial de sanciones de este sujeto en la Dirección General
de Tráfico habla de una persona muy dada
a infringir las normas de tráfico en lo referente a los límites de
velocidad y a la conducción temeraria. El citado Carromero
ha acumulado un total de 42 multas de tráfico desde el año 2009, tres de ellas
por exceso de velocidad, teniendo que haber abonado en concepto de multas un
total de 3700 euros y habiendo perdido el total de sus puntos. Carromero fue multado una vez en el
2009, dos en el 2010, 17en el 2011 y en el 2012 nada menos que 22, menudo carrerón
nunca mejor dicho.
http://www.elmundo.es/america/2012/08/10/cuba/1344582940.html
http://www.elmundo.es/america/2012/08/10/cuba/1344582940.html
A
pesar de todo esto, las siguientes lineas
no van a ser una crítica a que el penado haya sido repatriado para que cumpla en España la
condena impuesta, el tema que se va a tratar es otro.
La
cuestión es que mientras que se desarrollaban las gestiones ante el gobierno
cubano para la repatriación del condenado y se movilizaba la opinión pública a
favor de esta, se producía en territorio
argentino el sangrante caso del que era
involuntaria e inocente protagonista otra compatriota, pongámonos en antecedentes
de la situación de ella.
Nos
referimos a Enma Rodriguez Pinar, economista
de 54 años, la cual vivía con sus tres hijos en casa de su madre la cual le
ayudaba de este modo a subsistir. Enma,
cansada de esta situación de paro en la que se encontraba y que le obligaba a
vivir en precario decidió partir a
Argentina con la intención de montar allí un negocio.
Una
vez que se encontraba allí contrajo una
neumonía atípica, siendo por esta razón que solicitó ser repatriada para ser tratada en nuestro país, petición que no fue atencida.
http://www.20minutos.es/noticia/1693222/0/madrilena-enferma/argentina-repatriacion/ayuda-espana/
http://www.20minutos.es/noticia/1693222/0/madrilena-enferma/argentina-repatriacion/ayuda-espana/
Su
estado empeoró, siendo visitada en numerosas ocasiones por sus hijos y por el
cónsul en la ciudad de Córdoba.
Enma
no fue trasladada finalmente a España y el 20 de Diciembre del pasado2012
fallecía.
Como
queda perfectamente claro, esa igualdad tan cacareada, en la actualidad no
existe. Y es que en este régimen partitocrático, que tanto se vanagloria de
ella unos son más iguales que otros. el carnet del partido pesa bastante más
que esa paridad de derechos.
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