Entre las medidas de las que se habla para hacer frente a la crisis económica que de un modo tan serio afecta a la economía española, y por tanto a los trabajadores en general, se encuentra una que hace referencia a la negociación colectiva. Tal variación modificaría de modo sustancial este tipo de acuerdos, privando a los trabajadores de uno de los elementos de que en la actualidad disponen para que sus derechos laborales sean respetados.
Hasta ahora la negociación colectiva se lleva a cabo entre los sindicatos y los representantes de las empresas de un sector para llegar a un acuerdo en lo referente a las condiciones laborales que han de aplicarse a la generalidad de los trabajadores de ese sector.
Las condiciones que resultan de tal negociación resultan de aplicación obligatoria por las empresas del sector a la hora de establecer las condiciones que han de darse entre la empresa que contrata y el trabajador.
Lo que se pretende, al menos eso es lo que se argumenta, es “flexibilizar” las condiciones laborales para de este modo hacer que las contrataciones resulten más atractivas y menos gravosas para los empresarios y de este modo se contrate más y de este modo se reduzca el altísimo porcentaje de desempleo existente.
El cambio que se propone es que las negociaciones colectivas, en lugar de realizarse por sectores, como hasta ahora, se realicen por empresa. Siendo las condiciones laborales que resulten del pacto entre los comités de empresa y los empresarios las que habrán de aplicarse a las condiciones laborales entre empresa y trabajadores.
Pudiera parecer que tal modificación no es excesivamente gravosa para los trabajadores, y más ante esta situación económica y dada los elevados índices de desempleo existentes.
Pero tal alteración es todo menos anecdótica, unas negociaciones por sector liberan a los trabajadores de la presión directa que el empresario ejercerían sobre los trabajadores.
Y es que negociaciones más próximas pueden imponer unas condiciones de salarios, horarios, etc. debido a que siempre estaría presente la posibilidad del despido o la no renovación del contrato de aquellos que negocian por parte de los trabajadores.
En definitiva, la transformación que se pretende no sería si no un recorte de los derechos laborales de los trabajadores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario