La indigencia moral , los complejos antiblancos y
el ciego buenismo del wellcome refugees, han hecho que mientras que se han dedicado
cientos o miles de horas de emisión en televisiones y radios y se han vertido
ríos de tinta en los periódicos tratando el tema de “la manada”, esa misma
prensa, radio y televisión de España, al igual que ha ocurrido con las
feministas y toda la clase política, han guardado un vergonzoso y cómplice
silencio respecto al gran número de violaciones, la mayor parte de ellas grupales,
que han venido llevando a cabo inmigrantes musulmanes, procedentes tanto del
Magreb. de Oriente Medio como de la zona subsahariana.
Y este
silencio resulta más escandaloso si cabe cuando frente él los medios
extranjeros se están haciendo eco del aumento de violaciones protagonizadas en
nuestro país por inmigrantes.
Los grupos
feministas, los partidos políticos, los periodistas y una gran parte de la
población ha puesto el grito en el cielo protestando por los nueve años con que
la audiencia de Pamplona ha condenado a los supuestos abusadores de “la manada”,
abusos que habrían tenido lugar durante los sanfermines del 2016.
Todos los
arriba citados se han sentido escandalizados por la sentencia y han mostrado
empatía hacia la chica madrileña que realizó la denuncia por agresión,
curiosamente los miembros de la autodenominada “manada”, hacia los que desde
luego siento el mayor de los desprecios por la manera tan chabacana y ofensiva
de referirse a las mujeres y de actuar, han sido condenados por un delito del
que no habían sido acusados, puesto que se les juzgaba por agresión y se les
condena por abuso.
Con las que ninguno
de esos grupos feministas y movimientos populares sensibilizados parecen
haber sentido la misma ni parecida empatía es con esas chicas que han sido secuestradas
y violadas durante días por inmigrantes.
Pero que
tondo soy, olvidaba que en todos estos casos en los que las agresiones sexuales
son llevados a cabo por inmigrantes, supuestos refugiados, los feministas y
defensores de la ideología de género se encuentran ante un conflicto de
intereses ideológicos: por un lado defienden esa ideología buenista que busca
el mestizaje mediante la llegada de cientos de miles e incluso millones de
supuestos refugiados, para lo que estos han de ser aceptados plenamente por la
población de nuestro país y por otro lado se encuentran con la defensa de la integridad sexual de la
mujer y de sus derechos, eso sí, considerado siempre desde un enfrentamiento frontal
a eso que llaman heteropatriarcado y desde esa lucha contra el varón que lleva
aparejada la ideología de género.
En esta
disonancia ideológica en la que se ven sumidos estos grupos ha salido
claramente victoriosa la cuestión del buenismo pro-inmigración, pero como no podían
dejar claramente de lado la defensa de la mujer, pues ello habría resultado
demasiado evidente y escandaloso, han optado por ignorar las agresiones
sexuales grupales llevadas a cabo por inmigrantes, supuestos refugiados.
Esto lo han
realizado gracias a la ocultación de los hechos que han llevado a cabo los
medios de manipulación, o como mucho han sido referidos de pasada, en tercera
página o como una simple nota al margen, y siempre ocultando el hecho de que los
agresores o violadores habían sido inmigrantes.
Lo que en
segundo lugar hacen esos tan entregados defensores de la mujer es plegarse de
manera cómplice al silencio y a la minusvaloración que los medios han hecho de
las agresiones sexuales, todo ello con la intención de impedir que se produjese
cualquier referencia al origen étnico-religioso ni condición de inmigrantes de
los autores de las agresiones sexuales grupales a las que nos estamos
refiriendo.
En el caso
de Pamplona no se ha ocultado nada, más bien todo lo contrario, el nombre, la
ciudad de origen, la profesión e incluso antes del fallo del tribunal se habían
hecho públicas sus imágenes. Pero claro eran blancos, hombres y españoles.
Lo cierto es
que ninguna asociación feminista ni grupo político supuestamente defensor de los
derechos de la mujer ha hecho públicamente referencia a esta ola de agresiones
sexuales que han llevado a cabo inmigrantes-supuestos refugiados- y de la que
están siendo víctimas muchas mujeres, especialmente jóvenes, adolescentes e
incluso niñas.
Estas
asociaciones feministas, grupos políticos y población supuestamente
concienciada tratarán de excusarse señalando que si no han actuado ha sido
debido al hecho de que no han tenido conocimiento de estos casos a causa
precisamente del apagón informativo levantado en torno a ellos.
Pero esa
argumentación no pasa de ser un mal y falaz pretexto, y lo es puesto que si un
servidor los ha recopilado que careciendo de los contactos, del tiempo y de
ayudas económicas de que esos grupos disponen,
también ellos conocerían la información en cuestión, si los grupos feministas,
partidos defensores de la ideología de género y población en general no lo ha
hecho es tan solo por falta de
interés o por no querer que la
población tenga conocimiento de que se está produciendo un aumento de
violaciones de las que son culpables
inmigrantes y supuestos refugiados.
Como muestra
de los sucesos a los que estoy haciendo referencia, y en los que se puede
constatar la gravedad de estos y la nula
repercusión que han tenido a nivel periodístico y social voy a señalar
algunos de ellos. También voy a referirme al hecho de que no pocas agresiones,
incluso dentro de determinados colegios e institutos han sido referidos los
hechos, pero siempre ocultando que los agresores eran sujetos inmigrantes o descendientes
directos de estos.
Marzo de 2018.
Son detenidos nueve jóvenes miembros de un grupo, han sido detenidos como acusados
de abusar y violar a tres chicas menores que se encontraban fugadas de un
Centro de Recepción de la Generalidad Valenciana, los investigadores sostienen
que los acusados-detenidos formaban una banda organizada de delincuentes que
captaban a adolescentes en situación de desamparo a las que suministraba
alcohol y drogas para mantener relaciones sexuales con ellas.
Todos los jóvenes son argelinos. Las víctimas tenían
14,15 y 17 años.
El caso, con
ser de por sí gravísimo presenta cuestiones que lo hacen aún más grave.
Cuando la
menor de las víctimas, la de 14 años, regresó al centro de acogida, reveló a un
educador que había estado retenida durante 24 horas en un piso del barrio de la
Goteta- Alicante donde fue repetidamente violada por los miembros del grupo detenido.
Abril del
mismo 2018. Una joven de 19 años fue violada en grupo por varios chicos, uno de
ellos lo acababa de conocer en una discoteca, todos los sujetos eran de
nacionalidad argelina y a uno de ellos se le detuvo cuando intentaba huir de
España a Argelia desde el aeropuerto Elche-Alicante. Todos los detenidos, salvo
uno de ellos al que aún se le continúa buscando, pertenecen a familias acaudaladas
de Argelia.
10 de
diciembre del 2017 en Villanova i la Geltrú, una mujer que se dirigía al trabajo
poco después de las diez de la noche fue abusada y agredida sexualmente por
seis jóvenes marroquíes, uno de ellos menor de edad, que tras abusar de ella la
golpearon y recibió insultos racistas. Fueron detenidos pero el juez los puso
en libertad con cargos. Cuatro días después tan solo cien personas se concentraron
para protestar por la agresión sexual, ¡igual que ha ocurrido hoy con las
manifestaciones de toda España para protestar por la sentencia de Pamplona!
(por supuesto es ironía, muy triste ironía).
26 diciembre
del 2017, violación múltiple en Canarias de una turista danesa. La violación
fue llevada a cabo por cinco sujetos de nacionalidad marroquí, cuatro de los
cuales ya han sido detenidos.
20 febrero
del 2018, una mujer belga de 32 años fue violada en Torrevieja-Alicante por un
marroquí cuando a las 6 sacaba su perro a pasear.
22abril del
2017, una mujer de nacionalidad paraguaya fue violada por cuatro rumanos, ya
detenidos, en un coche en las inmediaciones del Estadio Olímpico de Sevilla.
Desde luego
los casos expuestos no son, ni mucho menos, una enumeración exhaustiva de las
violaciones grupales ocurridas en España llevadas a cabo por inmigrantes o refugiados,
una exposición exhaustiva por su cantidad se haría demasiado prolija, pero
además sería imposible debido a que en muchas
de las violaciones grupales no se hace referencia a la nacionalidad u origen de
los supuestos autores, y esto cuando no son directamente omitidos los mismos
hechos.
¿Cuando despertará la sociedad?, porque de seguir así llegaremos a
una situación como la que padecen Alemania o Suecia, y cuidado porque este
verano tal y como ha señalado el FRONTEX de la U.E., llegarán a nuestro
territorio más de un millón de inmigrantes procedentes del Magreb, el Árica
subsahariana y Pakistán, y esto será así dado que el camino terrestre por Turquía y el Cáucaso.
Y por mar hacia Grecia han sido bloqueadas y
que la salida desde Libia a Italia recientemente se ha cerrado. Es así que toda
esa masa de inmigrantes intentará llegar a Europa a través de España, utilizaran
Marruecos como zona de paso para saltar la valla o alcanzar en patera las
costas del sur de España.
Basta ya de
ocultar la verdad, que es la peor de las
mentiras, para defender lo políticamente correcto, aún a expensas de la
integridad, como es el caso actual, de las mujeres.
Realmente no sé a que estamos esperando, quizá a que lleguemos a una situación como la que padecen en Suecia, una situación que desgraciadamente ya no tiene vuelta atrás, o queremos una sociedad gobernada por la Sharía, esperamos a vivir como extranjeros en nuestra propia tierra.
Seremos responsables de ello, porque no hay mayor desgracia que merecer la propia desgracia.